Informamos en Granada sobre la Violencia de Género en América Latina

El pasado 11 de enero, Paz y Desarrollo organizaba la ponencia Violencia de género en América Latina: experiencias globales para la actuación local. En el acto, se informaba de las lecciones aprendidas de procesos de trabajo en la incidencia política y del fortalecimiento de organizaciones de mujeres y feministas tanto en Ecuador, Bolivia, El Salvador como en Guatemala, en el marco de proyectos con el apoyo de la Agencia Andaluza de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AACID).

 

Salón de actos del Centro de Documentación Científica
Olga Pozo y Francisco Pineda en la presentación del acto.

 

 

 

 

 

 

 

 

En la apertura del acto, que se desarrolló en el Centro de Documentación Científica de la Universidad de Granada, intervinieron Francisco Pineda, director de nuestra organización, que expuso la trayectoria de la ONGD en América Latina, agradeciendo la labor como aliado de la Agencia Andaluza de Cooperación Internacional para el Desarrollo. En nombre de la Agencia Andaluza de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AACID) intervino Olga Pozo, responsable del Área de América Latina, que destacó la importancia de «ponerse las gafas violeta», ya que sin perspectiva de género «no existe la cooperación real».

 

María Elena Alconchel, en un momento de su intervención.

María Elena Alconchel, directora de cooperación de Paz y Desarrollo, explicaba por qué es tan urgente trabajar en la erradicación de la violencia de género: «en El Salvador, con una población estimada de 6 millones y medio de personas, una mujer es violentamente asesinada cada 18 horas por violencia machista; mientras, en Ecuador, 6 de cada 10 mujeres han vivido algún tipo de violencia de género», y todo ello, sin mencionar la condena legal y moral que sufren las mujeres que abortan, que implica que algunas sufran “penas de hasta 30 años de prisión”.

Pero la violencia de género abarca más esferas de la vida de las mujeres, como explicaba Fátima Pérez, técnica de proyectos de cooperación de Paz y Desarrollo: «en el ámbito de la familia y cuidados, las cifras muestran que en Guatemala las mujeres invierten 7 horas diarias en labores de cuidado, mientras que los hombres, sólo 0,7». Pero en la política la situación no es diferente: «en Bolivia, entre enero y octubre de 2017 se registraron al menos 47 denuncias de acoso y violencia política contra concejalas».

 

Por su parte, Estíbaliz Táboas, técnica de proyectos de Paz y Desarrollo, que desempeña su labor en Ecuador, explicaba la estrategia que se utilizó para abordar esta fuerte desigualdad: “el programa se abordó de forma integral, mejorando capacidades individuales y colectivas de las mujeres y de las instituciones públicas. Los municipios en los que se trabajó cuentan ahora con un marco político y/o legal, construido con la participación de las mujeres, que posiciona la igualdad de género como una prioridad municipal, con asignación presupuestaria para la implementación. Las mujeres aumentaron su empoderamiento y, por tanto, se hizo efectiva su necesaria participación política”.

 

Estíbaliz Taboas, durante su intervención.
Fátima Pérez, durante su intervención.

 

 

 

 

 

 

 

Como contaba Fátima Pérez, “no todo son malas noticias”, ya que, gracias a este empoderamiento de las mujeres se ha logrado, por ejemplo en Centroamérica, establecer iniciativas económicas que han permitido “mejorar los ingresos de mujeres en riesgo o que habían sido violentadas, lo que fomenta la independencia económica de sus parejas”; en Ecuador, además, han quedado establecidas mesas interinstitucionales de género a nivel municipal y provincial, de manera que “al convocar distintos actores sociales que trabajan en los territorios, se consigue crear un escenario propicio que aumenta el impacto positivo”.

 

Sin embargo, queda mucho camino por recorrer en el avance hacia la equidad de género y, como retos fundamentales y apuestas de la ONGD Paz y Desarrollo, María Elena Alconchel indicaba que “es necesario abordar los diferentes tipos de violencia de forma específica, así como trabajar el cambio de patrones machistas desde la primera infancia, específicamente en la prevención y erradicación de la violencia sexual”, sin olvidar que urge “el trabajo directo con hombres en modelos no convencionales de masculinidad”.

 

En la ponencia, además de proyectar el documental «Voces contra la violencia de género», intervino además el Centro de Iniciativas de Cooperación al Desarrollo de la Universidad de Granada (CICODE) a través de Gabino Gutiérrez, alumno del Máster de Cooperación de la Universidad de Granada que realizó las prácticas del mismo con Paz y Desarrollo en Ecuador en 2017, que explicaba el proyecto en el que participó: “el principal objetivo comprendía fortalecer el diálogo entre actores políticos y organizaciones de mujeres para enfrentar la violencia de género”.

 

 

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